En Venezuela, como lo indica la lectura, la reforma de la seguridad social comienza en la década de los 80, en ella participaron instituciones con propuestas para solucionar la crisis o reformar la mismas. Este problema nace por la mala gestión publica, corrupción, entre otros, lo que explota al final en protestas por parte de los ancianos, ya que necesitaban un ajuste de dicho seguro, esto debido a que lo que recibían, no alcanzaba para cubrir sus gastos mínimos. Por ello para el año 1997 se crea una comisión tripartita para, la cual al momento de comenzar su investigación se da cuenta de la profunda crisis en la que se encuentra sumergido el IVSS, lo que lleva que para el 30 de diciembre del año 1997 el presidente de turno promulgue la ley Orgánica del Sistema de Seguridad Social Integral. Ya para finales de 1998 el gobierno para ese momento saliente quería aprobar un conjunto de leyes con aires privatizadoras, lo que lleva a escuchar muchas críticas.
Ya para el 30 de diciembre del 2002 el gobierno actual promulga una nueva Ley marco de Seguridad Social, que como lo indica la lectura, cuenta con un amparo constitucional, que se encuentra en el artículo 86 de la constitución nacional. Con esta nueva ley desaparece cualquier intención de intervención privada.
Desde el punto de vista de
Una de las primeras críticas indica que esta ley es de muy complicado empleo debido a la poca viabilidad financiera con que cuenta el estado para costearla, y para ellos (CTV) en los próximos años nuevamente existirá la necesidad de realizarle una nueva reforma a la ley de Seguridad Social. Otra de las criticas se debe al carácter ideológico con el que cuenta esta ley, que ya sabemos cual es la ideología actual de nuestro gobierno; y por no dejar participar o no existir el dialogo tripartito para poder opinar sobre esta nueva reforma, es decir a la fuerza que le importa esta ley no se le dio ninguna oportunidad para opinar. También se dice que es totalmente equivoco obligar a los trabajadores a cotizar el seguro social, ya que si el gobierno garantiza el servicio para todos los venezolanos, este debería ser financiado por los impuestos recabados, ya que los trabajadores entonces estarían perdiendo porque realizaría una doble aportación y recibiría las mismas prestaciones de los no obligados o los que no cotizan el seguro social.
Para
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